Termas de Jordán: el paraíso entre las yungas

Las Termas del Jordán, situadas en la localidad de San Francisco, Jujuy, son uno de los tesoros mejor guardados del noroeste argentino.

Ubicadas a 17 kilómetros al sur de Valle Grande, a una altitud aproximada de 1000 metros sobre el nivel del mar, ofrecen una experiencia única gracias a su entorno natural de película, sus propiedades terapéuticas y su acceso exclusivo.

Estas termas se han convertido en un destino ideal para todos aquellos que les gusta el trekking, combinando relajación y una conexión profunda con el medio ambiente.

Las termas y sus ojos de agua

El principal atractivo de las Termas del Jordán son sus «ojos termales», pozos naturales que se forman a lo largo del río Jordán.

Estos pozos termales son escasos en el mundo y tienen profundidades que varían entre los 40 centímetros y los 2 metros, dependiendo de la zona. De entre ellos, destaca la famosa «Laguna Azul», el ojo de agua más grande de la zona, cuyas aguas de un llamativo color turquesa parecen sacadas de una postal.

Esta laguna, con su entorno natural intacto, se ha convertido en un importante atractivo turístico, aunque no es para todos, ya que su acceso no es tan fácil.

Propiedades terapéuticas

Las aguas termales de Jordán son conocidas por sus propiedades medicinales y curativas. Con una temperatura promedio de 30°C, sus aguas fuertemente mineralizadas contienen sulfatos, cloruros y sodio, que las hacen ideales para tratar enfermedades reumáticas, eliminar toxinas y mejorar la salud de la piel.

Al nadar en estas aguas, los visitantes pueden disfrutar de sus beneficios relajantes y rejuvenecedores de manera inmediata, sin la necesidad de tratamientos adicionales.

Cómo llegar a las Termas de Jordán

Llegar a las Termas del Jordán no es sencillo, pero la recompensa lo vale. Para acceder a este paraíso natural, primero se debe viajar a San Francisco, un pequeño pueblo en el Departamento de Valle Grande, a 165 kilómetros de la ciudad de San Salvador de Jujuy.

El trayecto sigue la Ruta Provincial Nº 83, un camino que atraviesa el majestuoso Parque Nacional Calilegua, lo que añade un atractivo extra al recorrido.

Desde San Francisco, la travesía continúa a pie o a caballo, en un trayecto de aproximadamente 16 kilómetros (ida y vuelta). Esta caminata, que solo se puede realizar entre los meses de abril y octubre debido a las lluvias intensas del verano, tiene una dificultad media y lleva al visitante a través de un desnivel total de 800 metros, en una ruta mayormente en bajada durante la ida.

El recorrido finaliza con el cruce del Río Jordán y un descenso de 200 metros que conduce directamente a la quebrada donde se encuentran las termas.

Recomendaciones para la visita

Dado que las Termas del Jordán se encuentran en una zona perteneciente a la comunidad aborigen, es fundamental obtener autorización previa para visitarlas y contar con un guía local. Estos guías no solo conocen bien el terreno, sino que también garantizan una experiencia segura y enriquecedora para los visitantes.

Algunos consejos útiles para aquellos que planean visitar las termas incluyen llevar calzado adecuado para trekking, agua suficiente para mantenerse hidratado y repelente de insectos, ya que la zona puede ser propensa a mosquitos.

Es importante también tener en cuenta las condiciones climáticas, ya que la región experimenta lluvias intensas durante los meses de verano y la niebla es frecuente, lo que puede afectar la visibilidad y el estado de los senderos.

Alojamiento y servicios turísticos

San Francisco es el principal punto de partida para quienes desean visitar las Termas del Jordán, y cuenta con diversas opciones de alojamiento, como hostales, casas en alquiler o zonas de camping. Además, otras localidades cercanas como Calilegua o Libertador General San Martín también ofrecen hospedaje de calidad.

Para aquellos interesados en explorar más a fondo la región, existen excursiones organizadas por guías locales que brindan una experiencia completa, incluyendo la posibilidad de conocer otras maravillas naturales cercanas.

Clima de la zona

El clima en las Termas del Jordán varía según la época del año. La región tiene un clima cálido y húmedo durante gran parte del año, con una marcada estación de lluvias entre noviembre y marzo.

Durante este periodo, las lluvias pueden hacer que los caminos sean intransitables, por lo que es mejor visitar las termas entre abril y octubre, cuando el clima es más seco y agradable.

En invierno, aunque las temperaturas son más frescas, el clima sigue siendo ideal para disfrutar de las aguas termales y explorar los alrededores.