Hace siete años, en el corazón mismo de la capital jujeña, comenzó a latir un espacio verde que no existía. Hoy hay senderos, árboles, arte, juegos, vida. El Parque Xibi Xibi, uno de los proyectos urbanos más transformadores de los últimos tiempos en San Salvador de Jujuy, celebró su aniversario con una jornada cargada de emoción y participación comunitaria.
El intendente Raúl “Chuli” Jorge fue el encargado de encabezar el acto central. Acompañado por funcionarios municipales, trabajadores de distintas áreas y vecinos de todas las edades, remarcó que el parque ya forma parte de la memoria colectiva. “Este lugar siempre estuvo en el corazón de los jujeños, aunque no existiera como lo vemos hoy. El río fue parte del origen mismo de la ciudad. Lo que hicimos fue resignificar ese vínculo, volver a darle valor”, señaló.
El parque, que atraviesa gran parte del centro capitalino, no solo fue una obra de infraestructura. También implicó un cambio en la forma en que la comunidad se relaciona con el espacio público.
El intendente aprovechó la ocasión para anunciar nuevas obras: dos pasarelas internas que permitirán cruzar el parque sin necesidad de utilizar los puentes vehiculares, la futura iluminación del puente ferroviario cercano al puente Tucumán y tres nuevas conexiones peatonales. “Seguimos apostando a que este lugar sea cada vez más accesible, más seguro y más vivo”, dijo.
La jornada incluyó también actividades educativas impulsadas por la Secretaría de Planificación y Ambiente. La titular del área, Adriana Díaz, explicó que más de veinte instituciones participaron con stands y propuestas didácticas. “Estuvieron presentes universidades, institutos de investigación y organizaciones ambientales. Los chicos aprendieron sobre biodiversidad, calidad del agua, especies nativas… Fue una experiencia que une ciencia y comunidad”, señaló.
Desde su inicio, el Xibi Xibi fue más que una obra pública. En palabras de Jorge, “hubo que superar piquetes, denuncias, resistencias. Había mucho miedo al cambio. Pero sabíamos que no podíamos resignarnos a tener un basural en pleno centro. Esto demuestra que con decisión política y trabajo sostenido, es posible cambiar la realidad”.
